La dignísima ejecutoria del ya expresidente de la Generalitat Valenciana no podía pasar desapercibida y en absoluto podía desaprovecharse. Y así sucede que no ya en cuestión de días sino en cuestión de horas el calvo mejor vestido (está por probar si a cuenta del prójimo) que sobrevuela el altiplano deslumbra con nuevo y mayestático aterrizaje en otro organismo público que estamos seguros aguardaba su advenimiento en candeleta.

La fortuna deparada por el destino de tan ilustre prócer debe servir de ejemplo a la turba moliciosa de contratados que a la conclusión del nexo jurídico que hoy les vincula con la Generalitat no saben exactamente primero si les van a volver a llamar cuando se les acabe el contractus y segundo cual es el mes concreto y preciso en que les van a ingresar la nómina. Que imiten a Camps. Que coge y va el tio y se deja lo de Molt Honorable President y aluego después va y resulta que enseguida mismo le sale otro buen trabajo bien remunerado a costa del erario público.

Al que esto opina y razona le gustaría que esas buenas gentes del Gato al Agua que se refocilan cual marica con banana de Honduras denunciando a los Griñanes que salieran un día haciendo chufla de lo de Camps. Porque guasa tener tiene.

A ver esos clones,.... !!!